En esta fase las alteraciones producidas en el lenguaje son múltiples y provocan en la persona una gran incapacidad para hablar, comprender y deglutir, lo que origina que la persona caiga en un mutismo casi absoluto, por lo que ya el proceso comunicativo es prácticamente nulo.
- La comprensión se encuentra gravemente alterada, presentando grandes dificultades para responder o realizar cualquier tipo de instrucción.
- La capacidad para deglutir alimentos (tragar) está muy alterada, necesitando ayuda o supervisión constante durante las comidas.
- La lectura y la escritura son capacidades que en esta fase, la persona ya ha perdido.
los logopedas de AFATE están a disposición de familiares y usuarios de nuestra Asociación para asesorarles y aclararles todas las dudas que tengan en estos temas.